Una investigación del Observatorio Político Dominicano (OPD-FUNGLODE), revela las ventajas y desventajas de aplicar el voto preferencial a nivel municipal en elecciones del 2020 y recoge experiencias de otros países de América Latina.
Santo Domingo, 6 de noviembre de 2018. El Observatorio Político Dominicano (OPD), una iniciativa de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (FUNGLODE), reveló que implementar por primera vez el voto preferencial a nivel municipal para las elecciones de este 2020, como lo establece la Ley Núm. 157-13 que instituye el voto preferencial, representaría desventajas para su organización por la complejidad que reviste estructurar unas elecciones con el volumen de candidatos que se presentarán en los próximos comicios del país.
Según una investigación realizada por las unidades de Partidos Políticos y Gobierno Local del OPD-FUNGLODE, de aplicarse el voto preferencial a nivel municipal en 2020, se aumentaría el número de boletas electorales de 164 a 450, con las que se elegirían a 1,164 regidores y sus suplentes y a 730 vocales, incrementándose el costo de la campaña electoral.
A este escenario se sumaría que en 2020 se celebrarán elecciones municipales y congresuales, y en febrero y mayo del mismo año se realizarán las presidenciales. Esto implicaría un montaje más complejo de lo que se ha visto hasta el momento en el país, debido a que al separar las votaciones de alcaldes y regidores se corre el riesgo de una fragmentación del voto, afectando la gobernabilidad municipal, precisa el estudio.
Otras de las desventajas que presenta esta modalidad, según el informe del OPD-FUNGLODE, son: el aumento del transfuguismo, la reducción del nivel de representación de los partidos minoritarios y el arrastre en favor de los senadores, entre otras.
El análisis establece como la mayor ventaja de la modalidad de elecciones por listas cerradas y desbloqueadas, que electores escogen directamente al aspirante de su preferencia de una lista presentada por los partidos políticos, que los votantes pueden manifestar directamente su preferencia por un determinado candidato.
En República Dominicana el voto preferencial ya ha sido eliminado por la Junta Central Electoral a través de su resolución núm. 74-2010, luego de ser aplicado en las elecciones del 2002, 2006 y 2010; sin embargo fue restablecido para las elecciones del 2016 tras aprobarse en 2013 la Ley Núm. 157-13.
Cuota femenina
La publicación también indica que el voto preferencial a nivel municipal no garantiza el cumplimiento de la cuota femenina establecido en la Ley Núm. 33-18, de Partidos, Agrupaciones y Movimientos Políticos, ya que tradicionalmente los hombres han tenido el protagonismo en el ámbito político nacional. Esto se agravaría por el hecho de la competencia económica de las candidatas frente a los candidatos.
Sin embargo, la investigación señala que el porcentaje de mujeres en la Cámara de Diputados mostró un incremento hasta 2016 cuando se realizaron elecciones con la modalidad del voto preferencial.
“Aproximadamente ¼ de los miembros de la Cámara es mujer. Eso demuestra, de que aún con la implementación del voto preferencial existe un desequilibrio en la representación femenina, tampoco se pudo lograr con la implementación de listas de candidaturas cerradas y desbloqueadas”, establece el estudio.
Experiencia internacional
El estudio del OPD-FUNGLODE recoge la experiencia del voto preferencial a nivel municipal en Chile, Brasil, Colombia, y Argentina donde esta modalidad ha incrementado la división interna en los partidos políticos, el clientelismo, el dispendio de recursos económicos, el financiamiento ilícito, competencia desleal y el incremento de los votos nulos.
“El nivel de abstención en las elecciones municipales de Chile de 2016, alcanzó el 65.05%, que ha sido el más alto de su historia electoral…”, indica la investigación.